lunes, 30 de marzo de 2015

Semana Santa, semana grande

Aunque toda la familia ya os imaginábamos vestidos de nazarenos en la madrugá, vamos a tener que esperar.

Estoy convencida que os vamos a transmitir este sentimiento y gusto por la Semana Santa; por las cofradías, la música de tambores y cornetas, el olor a azahar, a todo lo que que tiene de cultural y de costumbre unida a la familia pero sobre todo al recogimiento, a la oración íntima, a esa parte de la Semana Santa que te acerca a tus creencias y hace que los milagros existan.

Una de las grandezas de Él, es que hace que esos milagros no se produzcan ni en el tiempo ni en la forma que solemos pedirlo sino cuando y como los necesitamos de verdad, así que vamos a dejarlo en sus manos y que junto a su Madre que también es la Madre de todos, nos den la fuerza y paciencia para que esperemos el momento más idóneo de nuestro encuentro.


  

3 comentarios:

  1. El año que viene seguro que ya tienes a los pequeños cofrades dando guerra. Ánimo, Raquel

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  2. Estoy con Mamá y Papá Jones de acuerdo, para el año que viene os veo siguiendo los pasos y cantando saetas. Mucho ánimo, llegará en el momento que menos os lo esperéis.

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  3. Gracias chicos, yo también estoy convencida de ello. Que paséis una buena Semana Santa

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